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31.10.21

Carrillera de cerdo ibérico al vino tinto

 



 

La cocina es una de mis aficiones que ha ido creciendo con el paso del tiempo. Desde el pasado mes de enero, fecha en la que me prejubilé después de casi treinta años dedicados en cuerpo y alma al banco, disfruto con enorme placer de mi tiempo en la cocina. No me refiero al tiempo de cocinado obligatorio que es cuando me toca encargarme de hacer la comida en casa. Me refiero a esos días que me otorgo para disfrutar de la cocina y hacer feliz a los demás degustando el fruto de mi trabajo.

 

Varios de mis lectores habituales, sobre todo, los que más me conocéis, me habéis pedido varias veces que escriba un libro de recetas. No es mi intención ya que no soy un creador de platos, me conformo con ser un seguidor, copiador y en ocasiones, versionador de recetas de mis admirados cocineros. Martín Berasategui, Pepe Rodríguez en alguna ocasión y frecuentemente Joan Roca. 

 

Mi pasión por la cocina la completo, junto con Misi, mi mujer; con la posibilidad de visitar una o dos veces al año restaurantes con estrella Michelin. No son pocos los que hemos disfrutado y tras las visitas siempre hay algún plato que trato de emular. Hemos disfrutado de manera pasional cada visita a Marín Berasategui (4), El Bohío (4), Paco Roncero, Coque (3), Azurmendi, Aponiente (2), Akelarre, Gaytán, Ramón Freixa, Dstage, El Club Allard (2), Lúa (3) y otros con la estrella asomando como Dos Cielos (4).

 

( ) Entre paréntesis las visitas realizadas cuando exceden de una.

 

En cada visita, aprendo y disfruto. Cada uno expresa a su manera e interpreta la mejor versión del producto de cercanía al que convierten en su especialidad y en la marca de la casa.

 

Me estoy enrollando, y todo para justificar mi artículo de hoy, voy a compartir una receta que versiono de Joan Roca. De mis imprescindibles, su Can Roca es la ausencia más llamativa de mi lista de restaurantes para visitar. He llegado a estar en lista de espera, sin suerte. Tiene tanto éxito que la reserva se realiza con un año de antelación y se agota en minutos. Ya lo conseguiré porque no voy a dejar de intentarlo. 

 

Receta:

 

Carrilera de cerdo ibérico con salsa al vino tinto

 

1.- Salmuera

750 ml de agua

75 gr de sal gorda de cocina

 

Remover con una varilla hasta disolver la sal en el agua.

Sumergir las carrileras en la salmuera durante veinte minutos.

Secar en papel secante de cocina y reservar.

 

2.-Infusionar aceite de hierbas

40 gramos de Aceite de oliva virgen extra

2 ramas de tomillo

2 ramas de romero


Utilizo dos métodos, el paciente que consiste en introducir las hierbas en una botella que rellenamos de aceite virgen de oliva. Dejamos reposar durante cuatro meses, moviendo la botella un par de veces al mes.

 

O el método inmediato, en una sartén calentamos aceite a temperatura suave, unos 90º C. Calentamos durante unos cinco minutos con las hierbas sumergidas en el aceite. Dejamos enfriar, colamos y este es el aceite que utilizaremos para marcar las piezas en el paso posterior.

 

3.- Cocinar las carrilleras

1 kg de carrileras (3 por comensal).

50 gramos de aceite infusionado de romero y/o tomillo.

pimienta.

dos cucharadas sopera de harina de trigo.

500 ml de agua (aprox).

 

Retiramos la fascia y otras telillas que tenga la carne con la ayuda de un cuchillo bien afilado.

Pimienta al gusto y pasamos por harina cada trozo para posteriormente marcar en la olla donde hemos puesto a calentar el aceite virgen de oliva o el aceite infusionado de hierbas. Marcar por ambas caras y reservar.

Una vez tengamos todos las carrileras marcadas, las incorporamos a la olla donde está el aceite y las cubrimos de agua. Dejamos cocer durante 40 minutos a fuego suave. Reservar las carrilleras en su propia agua.

 

4.- Salsa al vino

2 puerros limpios

2 cebollas medianas

3 dientes de ajo

1 chile (opcional)

2 zanahorias medianas y tiernas

150 ml de vino tinto (cuanto mejor sea el vino, mejor saldrá la receta) el mismo vino nos servirá para maridar el plato.

4 cucharadas soperas de aceite virgen extra o del infusionado anterior

sal

 

Cortamos las verduras en trozos pequeños (1 cm aprox.) pochamos en la olla con el aceite caliente, salamos y cocinamos hasta que se caramelicen. Añadimos el vaso de vino. Una vez reduzca el alcohol, apagamos el fuego y reservamos.

 

5.- Cocer la carrillera

Carrillera cocida (elaboración del punto 3 anterior)

Salsa al vino (elaboración del punto 4 anterior)

1 cucharada de postre de Pimentón dulce de la Vera

 

Volcamos la salsa sobre la olla donde están las carrilleras cocidas y su agua. Calentamos hasta que llegue a hervir y posteriormente bajamos el fuego a la mitad, durando cocer unos 20-25 minutos. Incorporamos el pimentón y dejamos cocer otros 5 minutos.

Sacamos las carrilleras y las reservamos en otro recipiente. Trituramos la salsa con una batidora de mano y calentamos en fuego medio hasta que reduzca. Cuanto más reduzca más concentrado de sabor tendrá la salsa y más densa. El punto definitivo va en gustos. A mi personalmente prefiero que pueda mojar pan sin empaparlo de agua. Rectificar de sal y pimienta si necesitase.

 

6.- Presentación

 

Me gusta acompañarlo de patatas fritas o sobre una cama de puré de patatas.

Carrilleras cubiertas por su salsa, adornada con alguna hierba que tengamos a mano o cebollino.

25.10.21

Una mentira mil veces repetida no se convierte en verdad



 

La ilusión colectiva creada entre los ciudadanos nace del desconocimiento general. Ya sea por la escasa información real y verídica ofrecida por los políticos a los ciudadanos o por la pereza general para buscar la verdad. 

 

Una vez sabido esto, los políticos se apalancan en el uso de determinados datos no siempre contrastados, cargados de ideología, demagogia o repitiendo la idea que prevalece en Europa. Ya tenemos creado el campo de la discusión ideológica. 

 

Cada partido presente en la discusión se arma de un ejército de fieles dispuestos a replicar y hacer eco a cada mensaje publicado por cada una de las partes. Estos ejércitos de fieles cegados de intelecto convierten la política en una eterna pelea entre aficiones, un perenne Madrid-Barcelona de fútbol o baloncesto. 

 

La conversación fluye y es útil cuando a cada argumento esgrimido, con datos ciertos, se escuchan de manera activa con ánimo de comprender e intentar convencer. En el caso de que se enfrenten dos creyentes de idearios diferentes, es imposible la conciliación. La razón se alcanza desde el argumento y la reflexión. La fe se alcanza desde los sentimientos y sin necesidad de contraste. Los fieles ciegos a los dictados políticos e ideológicos oficiales funcionan como creyentes de una secta excluyente sin autocrítica ni raciocinio. 

 

En el año 2012 se aprobó una reforma del mercado laboral en España y desde ese momento todos los partidos de la oposición fijaron como argumento inamovible la promesa de derogarla, incluso llegaron a afirmar que sería lo primero que iban a hacer en el momento que llegaran al poder.

 

En estos años hemos tenido cuatro elecciones generales. 2015, 2016 y tras la moción de censura contra Rajoy, abril 2019 y noviembre de 2019. Desde estas últimas, una coalición PSOE y UP gobierna apoyada por diversos grupos independentistas y de izquierdas. Dividiendo en dos grupos diferenciados el arco parlamentario, algo muy futbolero, algo muy español, recuperamos el triste recuerdo de azules contra rojos. Más carnaza para los creyentes poco críticos y poco ilustrados que siguen las redes sociales como el nuevo libro sagrado.

 

Desde ese noviembre de 2019 las promesas han ido cayendo, el gran éxito del gobernante es ser inmune a las hemerotecas e inventarse los motivos que justifiquen cada decisión tomada con anterioridad. El mundo real nos sitúa como país en un colectivo dentro de una Europa con naturaleza política y económica supranacional, donde poco a poco se avanza en la armonización de las políticas con el fin de llegar a un espacio común real para todos los ciudadanos. El nuevo gobernante una vez se estrena en su puesto toma conciencia de lo que puede hacer en su casa sin ofender al resto de socios y lo que está vedado si no quiere verse excluido de la financiación ofrecida por el resto de los socios.

 

¿Por qué no se ha derogado la reforma del mercado laboral del 2012?, ¿Por qué la parte más demagógica del gobierno se está envolviendo en esta bandera?, ¿Busca provocar una ruptura pensando en una nueva cita electoral que según sus cálculos le pueda ser beneficiosa? 

 

Recordemos lo explicado por el presidente Sánchez en octubre de 2020 como los puntos más lesivos, bajo su punto de vista, de la ley que desea modificar, antes de escuchar a Europa decía derogar:

 

- Derogar el artículo 52.D del Estatuto de los Trabajadores derivado de la reforma laboral del año 2012 que permite la posibilidad de despido por absentismo laboral causado por bajas por enfermedad. Este despido fue avalado por el Tribunal Constitucional el pasado mes de octubre del 2020.

 

- Derogar la prioridad aplicativa de los convenios de empresa sobre los convenios sectoriales.

 

- Modificar el artículo 42.1 del Estatuto de los Trabajadores sobre contratación y subcontratación laboral a efectos de limitar la subcontratación a servicios especializados ajenos a la actividad principal de la empresa.

 

- Limitar la capacidad de modificación unilateral de las condiciones del contrato por parte de la empresa.

 

- Revisar el mecanismo de inaplicación de los convenios colectivos, orientándolo a descuelgue salarial vinculado a causas económicas graves.

 


Hace falta un explicación más clara de los motivos con argumentos, no obstante podemos hacernos una idea sobre lo que subyace en el planteamiento del presidente.

 

Anular la posibilidad de la empresa para despedir a trabajadores que tienen una sucesión de bajas médicas es profundamente ideológica. Desde el punto de vista de un trabajador es injusto poder verse despedido por sufrir alguna enfermedad que le obligue a faltar de su puesto de trabajo por motivos médicos probados. Desde el punto de vista de la empresa en injusto no poder despedir a un trabajador que no llega a un mínimo de productividad porque encadena multitud de bajas. ¿Dónde está la razón? Como en tantas ocasiones en un punto equidistante entre ambas posturas. Los extremos son injustos. ¿Buscaba el legislador el extremo o buscaba limitar el abuso del absentismo laboral? 

 

¿Es un problema el absentismo laboral? Olvidemos la demagogia y la ideología. Según la Encuesta de Población Activa (EPA) en el segundo trimestre de 2021 en España somos 19.671.700 trabajadores. Según el INE y Randstad, cada día 1.049.121 personas no acuden al trabajo diariamente. De ellos el 24,6% de ellos lo hace injustificadamente, 276.968 personas. El debate se amplía sobre la parte del 75,4% restante que con justificación médica son "reales". ¿Necesitamos modernizar el sistema o los criterios de concesión de baja médica?, la reiteración de determinadas bajas médicas ¿llaman la atención o se deben admitir siempre?

 

Es un tema sensible con ramificaciones en otras disciplinas y además ¿tantos simuladores de enfermedad existen? personalmente conozco a alguno, un caso de migraña oportuna los lunes posteriores a una derrota de su equipo de fútbol favorito. Yo he sufrido migraña casi cincuenta años de mi vida y este caso me daba especial rabia por lo que conozco de lo limitante que puede ser esta enfermedad y lo que luché para que nunca me doblegara hasta el punto de ausentarme de mi puesto de trabajo. Conocí otro caso de oportuna indisposición cada año durante el mes julio. Era tan conocido entre sus compañeros de trabajo que incluso organizaban una porra cada primavera para acertar la fecha concreta de la "aparición de esa enfermedad" que obligaba al empleado a tener dos meses de vacaciones cada verano. Anécdotas que ilustran lo que todos sabemos que existe, el caradura de siempre. Según los números en España hay muchos de estos. Curiosamente según datos del mismo estudio de Randstad y el INE el total absentismo en la Administración pública es del 7,8% (el 2,2% sin justificar), en sanidad el 8,6% (el 2,9% sin justificar), correos y reparto de paquetería el 7,9% (el 3,1% sin justificar). La media nacional de ausentismo está en el 5,2% (el 1,4% sin justificar). Parece que algo hay que solucionar y restar armas a las empresas no parece que sea la mejor decisión y eso que la parte más gravosa del problema corresponde a la Administración.

 

Respecto a la prioridad de los convenios de empresa sobre los sectoriales, entiendo que la voluntad del legislador fue permitir la posibilidad de alcanzar acuerdos entre los trabajadores y su empresa sin tener que depender de los acuerdos sectoriales. ¿Qué hay de malo en ello? Restando la ideología y el proteccionismo sindical defendiendo la existencia de los sectores tradicionales ¿qué razones hay para modificar la prioridad? 

 

Respecto a la subcontratación, el abuso por parte de las empresas reiterando la subcontratación evita la creación de puestos de trabajo estables. Esta propuesta de modificación propuesta por el presidente parece sensata para limitar los abusos y crear empleo estable.

 

Las dos últimas propuestas son para limitar su aplicación, no habla de derogación sin más. Toda limitación que se plantee con lógica, conocimiento y lejos de la demagogia tiene posibilidades de conseguir efectos positivos en el mercado de trabajo.

 

Si todo lo expuesto resume el punto de vista del gobierno, ¿qué razones hay para no haber realizado una reforma a la reforma laboral? 

 

Parece que la parte del gobierno que se relaciona con Europa y controla la economía, entiende que la reforma de la reforma no ayudará a la recuperación económica tras una crisis sin precedentes por la influencia en el parón de actividad por la pandemia. Por otra parte, la parte del gobierno que solo figura y crea eslóganes desea aprovechar la imagen formada alrededor de la vicepresidente de Trabajo por su capacidad de llegar a acuerdos para fijar y prorrogar los ERTES que han protegido el empleo de miles de trabajadores. Una dirigente política emergente entre una izquierda radical que pierde en cada proceso de elecciones su capacidad de influencia, marcando sus divisiones internas y sin capacidad para unificar el mensaje. En la habitual, llenos de demagogia e ideales sin contraste efectivo en una sociedad avanzada necesitan de una bandera a la que aferrarse, la reforma laboral. Querida ministra, tras casi dos años en el puesto ¿por qué no se hace?, ¿porque no eres capaz de convencer a tus socios de gobierno?, ¿ni a tus socios europeos? o porque sabes que es más rentable electoralmente hablar de algo que enfrentarse a la realidad del mercado al cambiar las reglas. No vaya a ser que la derogación de la reforma laboral traiga consigo más desempleo.

 

Esto es la política, prometer algo sin explicarlo bien. Tan complejo como el mercado laboral y tan lleno de sesgos inconscientes, sin contraste de datos con un cultivo abonado de ideología. 

 

No por mucho repetir una mentira se convierte en verdad. Un reto en apariencia veraz no tiene por qué ser cierto. El tiempo lo dirá. 


Una duda que me queda, ¿en qué medida reformar el mercado laboral en contra de la opinión europea puede comprometer las ayudas prometidas a España para recuperar la economía y modernizarla tras la pandemia?


Todo huele a oportunismo y a estrategia electoral a medio plazo. Seguirán prometiendo su derogación con la ambición de conseguir algún voto en esta simulación. Echando la vista atrás, ¿cuántas veces lo han prometido en los últimos meses? y tras estas promesas reiteradas ¿alguien se cree el relato?


Lo dicho, no por mucho repetir una mentira se va a convertir en cierta.


Me aburre la política.

17.10.21

El Juego

 


Correo electrónico


De: Club de Debate (Universidad Madrileña de Liderazgo - UML) 


Asunto: Convocatoria para El Juego.

 

"Estimado alumno:

 

Como cada año, en la segunda quincena de octubre, abrimos el proceso de selección de los nuevos miembros del Club de Debate. 

 

Esta semana será la primera de las tres pruebas de acceso para el prestigioso club de debate de la Universidad, llave de todas las puertas a la excelencia y al liderazgo en nuestro campus. Club exclusivo donde tradicionalmente han sido socios los mejores expedientes académicos de la Universidad.

 

A esta primera oportunidad podrán asistir un máximo de cinco participantes con un mínimo de tres, que serán seleccionados mediante sorteo entre los candidatos solicitantes. 

 

Se trata de un juego donde se premia la capacidad de conversación y la capacidad de darse a conocer a las personas. El tema de conversación se elige aleatoriamente eligiendo una carta de una baraja de cincuenta y dos, cada una de ellas tiene escrita una pregunta que será leída por el jugador a quien le haya correspondido contestar a la pregunta anterior y será quien decida hacia quién va destinada la nueva pregunta. Esa carta no volverá al mazo para evitar su repetición.

 

Se sorteará entre los jugadores a quién le corresponderá abrir el juego. Ningún jugador puede preguntarse a sí mismo. Las respuestas deben ser, en apariencia, sinceras y deben satisfacer la curiosidad de todos los participantes en la mesa del juego y al árbitro. Todas las preguntas son abiertas aunque por su formulación puedan responderse con un sí o un no, todas exigen argumentación. 

 

No está permitido no contestar. Se valorará positivamente que tras una respuesta directa se abra el debate entre todos los jugadores. Como se trata de un juego que exige concentración y seguir una conversación, quedarán requisados en una caja fuera de la habitación todos los móviles y dispositivos electrónicos que puedan distraer a los jugadores, incluidos los relojes. 

 

El vencedor será elegido entre los propios jugadores, en caso de desacuerdo, la decisión final corresponderá al árbitro. El único requisito para ser invitado a ser miembro del Club de Debate es proclamarse vencedor de una de las tres rondas de El Juego. 

 

Los interesados en participar deben inscribirse en el enlace al pie de este mensaje antes del próximo miércoles."

 

El viernes, expectación máxima en la sala del Club de Debate, asisten como espectadores todos sus miembros. Eligen a Esteban, el socio más antiguo del Club al igual que la presidente y el secretario. Una persona meritoria reconocida por todos como justo y sobre todo, gran escuchador. 

 

Veinticinco alumnos han solicitado participar. Un treinta por ciento del total de matriculados al primer curso. Los veinticinco esperan expectantes tras la puerta. A la hora señalada, Esteban bajo el marco del acceso levanta la mano demandando silencio para anunciar los cinco elegidos por la suerte.

 

–Ruego a los nombrados accedan al interior de la sala para disfrutar de El Juego, el resto de los solicitantes seréis convocados la semana que viene para la siguiente prueba que esta vez sí será para todos.

 

El silencio duele cuando la suerte es quien decide el destino. Los cinco elegidos tendrán tres oportunidades para poder conseguir la membresía codiciada por todos. Una por cada prueba de selección.

 

–Rocío Nieve, Laura Bandín, Sergio Contreras, Lucas Trona y Mercedes Peinado

 

La suerte está echada. Los participantes eligen su posición sentándose en las sillas situadas en el centro de la sala. Situadas en forma circular, siendo la principal y más cómoda, propiedad del árbitro, Esteban.

 

El sorteo determina que la primera pregunta la realizará Sergio. Mezcla el mazo con paciencia mientras reparte su mirada entre el resto de los jugadores. Ojos de mirada penetrante, de color negro donde el iris y la niña apenas se distinguen, llegan a intimidar. Juega con esa sensación, disfrutando del nerviosismo creciente entre los participantes mientras baraja las cartas entre sus manos. Finalmente corta el mazo y selecciona la primera de arriba.

 

–La primera pregunta es: ¿Sueles abordar a las personas que te gustan, o te puede la timidez? 

 

Una pregunta incómoda, sobre todo para aquellos a quienes la seducción es un reto inalcanzable. Revisa con su mirada la reacción de los participantes al escuchar la pregunta y elige a su víctima.

 

–La pregunta va dirigida a Laura Bandín.

–Cuando alguien me gusta– comienza Laura– llamo su atención de manera sutil, continuada en el tiempo alimentando su interés por mí y alentándole para que se me acerque. La habilidad mostrada en el acercamiento decidirá mi admisión a su cercanía.

–Eso no responde a mi pregunta. Estás definiendo una estrategia de seducción más pasiva pero no me queda claro si es por timidez, comodidad o por qué razón. Tampoco consigo saber el grado de éxito que consigues con esa estrategia. ¿Puedes contestar a la pregunta, Laura? Gracias.

 

Laura se remueve en la silla, incómoda con la reacción de su compañero. No estaba preparada para este ataque. Muerde levemente su labio inferior calmando su posible reacción racial, como todo en ella. La respiración sube su ritmo marcando el ascenso y recuperación del volumen de su pecho. Interiormente cuenta hasta tres y completa su argumentación.

 

–Puedo comprender que a los faltos de habilidad en seducción le pueda parecer que mi estrategia es facilona o incluso vacía. El intentar influir en los deseos de una persona utilizando otras herramientas distintas a la entrada directa es mucho más sutil y efectivo que un intento sin preparación repleto de frases convencionales. Siento que no sepas valorar lo efectivo de mi estrategia frente a la que parece que insinúas como la única válida que no deja de ser la típica entrada torpe propia de los inexpertos o rudos. No sé medir el éxito de una estrategia frente a otra, solo sé que a mí me funciona y que actores directos y agresivos como parece que puedes ser lo que tú prefieres, conmigo no tienen ninguna posibilidad. Con mi modelo, selecciono a la persona idónea y la invito a acercarse. Si me acerco yo, lo más probable es que la espante.

–Totalmente de acuerdo– interviene Rocío. Una mujer directa suele acongojar a los varones. Todos estamos llenos de ideas preconcebidas, de juicios de valor o sesgos que hemos ido aprendiendo por educación, cultura o costumbre. Una mujer activa en la seducción puede ser conocida como ligera de cascos, facilona o incluso considerarla por los varones como buscona. Una mujer insinuante se convierte en modelo de deseo incrementando el interés del varón elegido. Si además es de belleza reconocible como Laura, más posibilidades de espantar tiene.

–El razonamiento también es válido si se trata de una mujer la elegida. No necesariamente la estrategia que define Laura es heterosexual – Opina Mercedes.

 

El árbitro otorga un pequeño lapso de segundos esperando la intervención de Lucas o la réplica de Sergio. No llegan. Con una seña, indica que es el turno de Laura. Quien aparta la carta elegida anteriormente y vuelve a barajar, fijando su interés en el mazo. No quiere que su torpeza con los naipes la traicione. Elige su carta y mirando a Lucas, lee la pregunta:

 

–Lucas, ¿Alguna vez has discriminado a alguien?

 

De nuevo una pregunta donde los sesgos inconscientes gobiernan nuestro comportamiento frente a determinadas personas por su sexo, raza, religión, vestimenta o acento.

 

El juego se extiende durante tres horas que se harán muy largas para alguno de los participantes por las verdades que se ven obligadas a exponer, muchas de ellas pertenecen al baúl de sus secretos. Las sonrisas se van oscureciendo, el peso de las revelaciones dobla sus entrecejos hasta cambiar los ánimos y las seguridades.

 

Suenan preguntas que no dejan indiferente a nadie:

 

¿Has estado enamorado de la pareja de un familiar? Ahondando en situaciones conflictivas que casi todos prefieren esconder.

–¿Cuándo y en qué situaciones, quieres comportarte mal? Obliga a plantear tus límites morales.

–¿Cuál es tu última búsqueda en Google? Puede resultar algo embarazosa.

–¿Cuántas personas te odian? Saca a relucir tus conflictos y enemistades.

–¿Has hecho algo ilegal en la últimas semanas? Aunque solo sea un exceso de velocidad es probable que alguna ley hayamos infringido.

–¿Te gusta comer caracoles? Puede ayudar a reflexionar sobre comidas que no todo el mundo es capaz de meterse en la boca. Puede ser conflictiva si se pregunta sobre el plazo típico de la zona.

–¿Qué parte de tu cuerpo es la que menos te gusta? Complejos físicos de cada persona.

 De tus amigos, ¿quién es el más (o la más) irresponsable? ¡Qué mejor que hurgar en los trapos sucios!

–¿Cuál es la pregunta que más odias que te hagan? Una manera de ser incómodo.

–¿Entregarías a tu mejor amigo a la policía si supieses que es culpable de un crimen? Los límites de la amistad.

–¿Quién es la persona más importante en tu vida? Dar una oportunidad a los sentimientos.

 

Un juego holandés con una dinámica muy parecida a esta se está promocionando en Amazon y a través de redes sociales. Un conjunto de preguntas incómodas para responder en pareja, familia o amigos. E incluso para conocer a nuevas amistades.


Si necesitamos un juego para aprender a hablar entre nosotros es que la sociedad necesita una revisión. Menos tecnología y más trato. La amistad se mide en cercanía y abrazos no con "me gusta", "likes" o "+" en las redes sociales.

 

Hablar y escuchar. Simple y complicado a la vez.

8.10.21

Vidas paralelas

 



Recuerdo mi fascinación por la mujer del parque. Siempre arreglada con abrigos de un paño que desde lejos se adivina de calidad, coronado por un pañuelo de seda anudado alrededor de su cuello, manos cuidadas y voz suave, de esas que nunca levantan la voz. Con delicadeza hace aparecer la merienda de su hija de una pequeña maleta del tamaño de una libreta.

 

Alguna vez hemos coincidido jugando juntas sin llegar a ser amigas hacemos un buen equipo. Ella viste el uniforme de las Clarisas, con sus calcetines altos color azul que nunca los vi caer. Su pelo siempre recogido en dos trenzas perfectas con un olor perenne a colonia. Se llama Sara, adorna su cara una incipiente sombra preludio de bigote moreno. Su nariz ancha, me recuerda a la narizota de mi madre, ancha y con las cuencas muy abiertas.

 

Me fascina esa mujer por su elegancia, su saber estar y por esa postura al sentarse, siempre con sus piernas juntas protegiendo la intimidad que cubre la falda. Mi madre, Isabel, es más destartalada. Siempre en chándal y zapatillas de deporte, no recuerdo haberla visto nunca con falda y mucho menos con vestido. Trabaja en un supermercado reponiendo las estanterías y cobrando en la caja. Su horario es amplio y exigente. Tanto que llega derrotada. En ocasiones, olvida quitarse sus zapatillas blancas que imitan a una marca muy cara de deportivas y se tira en la cama durante horas, durmiendo a la hora que tenga a bien tumbarse. 

 

Hay días que almorzamos a la hora de la merienda y ya que se pone, la convierte en merienda cena para trabajar poco. Mi padre, Juan, casi siempre está en casa, sobrevive con trabajos esporádicos. Hombros caídos y peludos, camiseta blanca de tirantes llena de lámparas de grasa imposibles de limpiar por su descuido recurrente y viajes intermitentes a la nevera. Solo cuando falta cerveza se escucha su voz recordándole a mamá que tiene que traer más bebida del súper. No hay mucha conversación, el rumor de la televisión, siempre encendida, llena de ambiente mi hogar. 

 

He jugado con Sara a las muñecas, me ha prestado la suya. Un modelo publicitado en televisión, deseo de todas las de mi generación. Yo le he prestado la muñeca de trapo que me hizo mi abuela con retales. Nos hemos intercambiado nuestros mundos por un momento. Su madre, Ascensión, ha repartido la merienda que traía preparada para Sara para que nos llegue a ambas. Le conté que mis padres no estaban en el parque y que bajo sola a jugar. Le señalé mi casa a escasos doscientos metros de distancia en una zona sin tráfico. Ella asintió con mirada de lástima mientras nos iba racionando las galletas de la merienda. 

 

Suenan las campanas de la ermita, mi señal para regresar a casa, doy las gracias por todo y me despido. No he recorrido tres metros cuando oigo la voz melodiosa de Ascensión.

 

–¿Cómo te llamas, niña?

–Laura. – me despido con la mano mientras corro hacia casa.

 

Doce años después, coincido, en una noche de botellón, con Sara. Nos saludamos con el respeto del sabernos compañeras de juegos en la infancia. Ella tan mona, con ropa de marca, sigue con sus trenzas, el bigote ya lo disimuló. Todavía no tiene edad para arreglarse su nariz. Yo con un chándal heredado de mi madre, cada una a su estilo nos comportamos con total normalidad una con la otra, nuestras amistades desconfían. Choca mucho la diferencia social entre ambas y lo bien que nos llevamos. 

 

–¿Sabes, Sara? Parece que mi madre no era mi madre. 

–No entiendo. 

–Es complicado, mi madre falleció cuando yo tenía seis años. Mi padre me dejó al cuidado de mi abuela materna. Hasta ahí bien, resulta que mi abuela cansada de reclamarle el dinero para mi cuidado le puso una demanda en el juzgado ante su negativa a pasar la pensión de alimentos. Él argumentó que yo no soy su hija y el juzgado terminó solicitando una prueba forense de ADN que confirmó que no soy hija de mi padre ni de mi madre. 

–¿Y eso, cómo puede ser? 

–Eso es lo que quiero averiguar. He visitado al abogado gratuito que te ofrece el ayuntamiento y parece que la única opción para conocer la verdad es demandar al hospital donde nací. 

–¿Dónde naciste? 

–En el San José. El 7 de octubre de 2002

 

Sara queda pensativa, aparentemente afectada, con la mirada perdida en un infinito ilocalizable. Sus grandes aletas de la nariz se abren y cierran a un ritmo acelerado y creciente. 

 

–¿Estás bien? –pregunto. 

–Sí, perdona, yo también nací en el San José. –Calla que ambas coinciden en la fecha de nacimiento– ¡Qué fuerte! Ya me irás contando, Laura.

 

Dos años más tarde, ya con dieciocho años, Sara, junto con otras dos mujeres que nacieron el mismo día en el hospital de San Juan, recibe una notificación judicial para realizarse una prueba de ADN.

 

Sara intuye el resultado y se llena de miedos ante la posibilidad de perder a sus maravillosos padres. Miedos que su madre mitiga con ternura y una explicación sobre el concepto de ser madre e hija.

 

Sara y Laura nacieron con una diferencia de cinco horas, ambas compartieron sala de incubadoras durante un par de días. La enfermera encargada cometió el error involuntario de cambiar las hijas a sus madres, variando sus futuros. El destino resulta ser muy cruel con Laura. 

 

Casi con total probabilidad este intercambio nunca se habría conocido de no haber sido por la tacañería y el dolor de cuernos de Juan. 

 

La apariencia física de Laura alimentó durante años la sospecha de Juan sobre la infidelidad de la difunta Isabel. No era capaz de encontrar ningún gesto o característica física en la niña que le recordara a su familia. Se llegó a convencer de que no era su hija lo que terminó por justificar su incumplimiento de sus obligaciones económicas como padre.

 

La investigación ordenada por el tribunal confirma que Laura es hija biológica de Ascensión. 

 

El juzgado de familia sentencia en favor de la demandante, la abuela, y obliga a Juan a pagar la manutención de Laura actualizando los meses de impago previos. El argumento expuesto aclara que la paternidad legalmente reconocida es la que se refleja en el Registro Civil y en el Libro de familia. Laura fue inscrita como hija de Juan e Isabel lo que la convierte en su hija desde un punto de vista legal.

 

El abogado me aconseja reclamar judicialmente al Hospital y a la Comunidad Autónoma por los daños morales ocasionados durante estos años de separación de mi vínculo sanguíneo. Daños muy difíciles de cuantificar. ¿Cuánto vale una vida miserable comparada con una vida en un entorno normal, cariñoso, ordenado y limpio?

 

Actualmente estoy en tratamiento psicológico en un intento por mitigar el estado de ansiedad y desapego general que me impide conciliar el sueño, ordenar mi vida y centrarme en los estudios. Desearía encontrar el valor para ir a visitar a Ascensión, aquella mujer que me tenía fascinada en mi niñez y que tan amable se mostró siempre conmigo. Resulta que es mi madre biológica. Me frena poder hacer daño a Sara. De alguna manera somos como hermanas. Suelo verlas de lejos, a Sara paseando con su madre y mantienen intacta su relación forjada durante dieciocho años de cariño y complicidad. Esa vida que estaba escrita para mí y me robaron.

 

–¡Qué mala suerte y qué mala solución tiene todo esto! y ¿ahora qué, papá? o ¿te tengo que llamar Juan?




Ficción inspirada en una historia real:https://www.niusdiario.es/sociedad/sucesos/joven-reclama-indemnizacion-tres-millones-salud-larioja-intercambio-bebes-incubadora-reciennacidos-ninas_18_3199095114.html

3.10.21

Ya estamos todos

 




Parece lejano y no hace tanto. Recuerdo el final de la liga 2019-20 que vivimos confinados y los jugadores se tuvieron que hacer a jugar en estadios vacíos. La liga 2020-21 solo pudimos disfrutarla  por televisión animando a la pantalla sin que nuestro aliento se trasladara a los jugadores y aun así quedamos campeones. Comenzamos esta temporada con turnos de asistencia por sectores no siempre bien explicados ni comprendidos. Un avance para los aficionados condicionado por la normativa vigente. Nos sorprendía, visto con distancia, ver estadios en países cercanos con menos tasas de vacunación repletos de público y sin mascarillas. Aquí somos prudentes y vamos poco a poco.

 

Todo llega y desde el inicio del mes de octubre abrieron la posibilidad de completar los aforos de los campos. Para eso nos hemos vacunado ¿no? para ir a ver al Atleti.


El sábado 2 de octubre, partidazo, Atlético de Madrid reencontrándose consigo mismo contra el F.C. BARCELONA en crisis económica, moral e institucional postMessi.


Campo lleno hasta la bandera. Casi setenta mil seguidores rojiblancos huérfanos de fútbol en directo, salvo a los que nos ha tocado la suerte en la ruleta de los turnos. El himno coreado a pleno pulmón coincidiendo con la salida al campo de los jugadores quedó con unos decibelios más bajo de lo habitual por el matiz de la puta mascarilla.


El plan del Cholo estaba avisado, contundencia en las dos áreas. Empezamos un poco dubitativos en la medular sin conseguir imponer nuestro ritmo, destellos de calidad de Joao y Lemar calentaron el ambiente aumentando la esperanza de un buen resultado. Un impresionante control orientado del portugués desarboló a su marcador, le permitió pasar a un Suarez colaborador que supo ver el desmarque de veinte quilates del francés y gol tras esperar a que el portero se venciera.


Tras unos minutos de reacción de un Barcelona mandados por un chaval de diecisiete años, con gran futuro y aún un poco verde para jugar con los mayores, los de la capital catalana echaban de menos a su corazón argentino, a ese que por necesidad económica dejaron marchar y en el campo deja un enorme agujero de calidad.


Se quitó el Atleti esa reacción con otra jugada de calidad de los tres de antes, tras pase a Joao a Lemar que encuentra desmarcado a un Suárez hábil y con grandes dosis de sangre fría que jugó con defensa y portero para definir como un crac. Su corazón deseoso de venganza por el moobing sufrido hace poco más de un año, encontró la paz que otorga la revancha.


2-0 y a la ducha. El segundo tiempo, diseñado por el Cholo, recordó a aquellos Atléticos de Madrid de años pasados en el Calderón. Afianzarse con un pie atrás y encontrar alguna contra. Las pocas que tuvimos murieron en las manos del portero alemán o en carreras o pases incompletos de un todavía falto de forma Griezmann. 


Ganar el partido era importante, batir una estadística también. Por primera vez en la historia el Atleti termina tres partidos consecutivos contra el Barcelona sin encajar un gol. 


Pero esto no es una crónica deportiva, es un canto a la vuelta a la normalidad. Anoche en el Metropolitano rugimos como antaño setenta mil creyentes de la religión del luchar como hermanos, del no rendirse nunca y del esfuerzo como bandera. 


Nos reunimos, de nuevo, tras muchos meses de racionamiento. Ya estamos todos. Para esto nos hemos vacunado ¿no?


Aupa Atleti.


 

26.9.21

Fin de semana en la gran ciudad

 




Reyes, como todos los meses de septiembre planea un fin de semana largo en Madrid. El año pasado por aquello del confinamiento no pudo disfrutarlo. Tres días lejos de la censura y las miradas inquisidoras de sus vecinas del pueblo. Se siente vigilada desde que la pillaron disfrutando de tardes de pasión con Eulogio, su primo segundo por parte de madre con quien siempre tuvo una gran afinidad. No se ennoviaron por el qué dirán y porque necesitaban pedir una bula papal para poder desposarse. Al final la presión social pudo con ellos, sobre todo la presión que ejerció su fallecida madre, prima de la madre de Eulogio.

 

Con el pasar de los meses, a él le emparentaron con Lucía, una niña buena y sosa de la localidad quien curiosamente era heredera de un número incontable de fincas de labor, La marquesa. Un partidazo. Lástima de su poca fogosidad, acomplejada por su pelo pobre y su mirada estrábica hacia la izquierda. Solo un hijo, suficiente para encargarse del campo cuando ellos envejezcan.

 

Los cuerpos que se atraen son como imanes potentes, ya los puedes esconder, vestir o enterrar que si el polo opuesto pasa cerca, terminan por juntarse. Tras años evitándose, coincidieron en el funeral de Asunción, la madre de Reyes y 

tras esos momentos, encontraron escusas perfectas para reencontrar su pasión. Les pillaron besándose en la puerta de casa de Reyes, un descuido por su parte el haber abierto antes de su despedida pasional. La marquesa fue apercibida y ordenó a su marido que tomara distancia de su prima para que no se repitiera. El resto de las vecinas, temerosas de que la perdida de Reyes pusiera su mirada en alguno de sus hombres, la hicieron vacío mientras murmuraban a sus espaldas en cuanto se cruzaban con ella. La temían por su belleza, por su libertad y porque en el fondo no se sentían seguras de sus hombres.

 

Solo encontró comprensión en su amiga Laura, la de toda la vida, que sabía del enorme amor que existía desde siempre entre ambos primos. 

 

Laura, le encargó lotería de navidad comprada en Madrid. Reyes lo hacía solo por su amiga, dedicar una hora de su fin de semana para guardar la cola que se formaba entre turistas de media España para comprar sus encargos de décimos de las apuestas de la lotería navideña. Para hacer más corta la espera de la lenta fila de apostantes, decidió probar sus auriculares nuevos que acababa de comprar en FNAC. Como cada año, su primera compra siempre tenía algo relacionado con la tecnología. Unos auriculares tipo piloto de avión, inalámbricos para poder escuchar con nitidez música o sus series favoritas. En esta ocasión, eligió música de los ochenta. Los auriculares son magníficos, con una calidad de sonido excelente y un aislamiento acústico perfecto.

 

La fila avanza a un metro por minuto y medio, son muchos los apostantes y la compra media supera los seis décimos.

 

Tres días de compras, disfrutar del ambiente e ir al teatro. Ella sola sin nadie que la vigile.

 

Charles sobrevive mal que bien compartiendo un piso minúsculo con otros cinco compatriotas todos procedentes de Nigeria. Tras meses de viaje y trabajos en semi esclavitud para mantenerse durante su travesía, llena de dificultades y peligros, donde se enfrentaron a un oleaje especialmente bravo mientras cruzaban el estrecho. Vio morir a dos niños, una madre gestante y cuatro varones adultos. Charles no sabe nadar y por precaución se ató la muñeca a la barca. Esa decisión le ayudó a conservar su vida a diferencia de alguno de sus compañeros de travesía que en los golpes de mar saltaron fuera de la embarcación siendo incapaces de regresar al bote, ahogándose sin remedio.

 

Para Charles el fin de semana es la mejor oportunidad para vender su mercancía, traslada en una lona de grandes dimensiones bolsos y monederos que imitan el diseño de grandes y caras marcas de moda. Para facilitar su rápida recogida y huida su mercancía está atada a la lona de manera que cuando aparece la policía, es capaz de recoger todo su tenderete tirando de una cuerda y echándose al hombro su tienda en menos de dos segundos para salir corriendo un centenar de metros, los suficientes para que la policía no inicie su persecución. Es más una labor disuasoria que persecutoria. Sus ventas perjudican al pequeño comercio del centro y la imagen que quiere ofrecer Madrid a sus turistas no incluye este tipo de comercio pirata. Cierto es que sus compradores habituales son turistas de provincias con poco poder adquisitivo y que valoran una buena imitación para poder lucir en sus pueblos bolsos de Gucci, Carolina Herrera o Loewe sin serlo.

 

A la salida de FNAC, Reyes dedica unos minutos a observar los bolsos expuestos en la manta. Uno de ellos está ahí por ella, nota su llamada, una copia perfecta de un Coach de color azul marino, discreto y muy ponible. Tras un breve regateo, del que no se siente especialmente orgullosa ni habilidosa, consigue su capricho a treinta y cinco euros. Camina bajando la calle del Carmen hasta que topa con la larga cola de la lotería.

 

–Solo por ser tú, Laura. Me voy la tirar aquí dos horas. –Piensa Reyes mientras asciende hasta el final de la fila.

 

Ordena sus compras, aprovecha para sacar de su caja los auriculares, conectarlos a su teléfono y tras dejar en una papelera la caja y sus instrucciones, reordena sus pertenencias en su nuevo bolso.

 

La música de Nacha Pop, Mamá, Depeche mode y Tequila suenan con fuerza. Sus recuerdos de las noches de baile y fiesta con Eulogio en su juventud le vienen a la memoria al ritmo de los acordes conocidos y reconocidos desde entonces. La fila avanza, ya recupera la calle del Carmen, a escasos cuatro metros de la entrada de la administración de lotería más famosa de España. Repasa el papel donde tiene anotado el encargo de Laura –Un décimo par terminado en seis y que tenga un ocho entre sus otros dígitos y otro con la fecha de su cumpleaños 13764– 

 

La de supersticiones que deben aguantar los vendedores de la administración, sin perder su sonrisa le consiguen sus deseos y sale, siempre acompañada de su música, del local mientras guarda sus décimos en el bolsillo interior con cremallera de su nuevo bolso.

 

Una carrera desenfrenada se inicia en la plaza del Callao, hay un evento autorizado para dentro de media hora y la policía tiene orden de desalojar la plaza de manteros para poder acordonar la zona. 

 

Una patrulla de refuerzo sin experiencia en el centro de la ciudad, es la encargada de expulsar a los manteros, doce nigerianos que venden ropa y complementos en el pico del FNAC entre Carmen y Preciados.

 

Los policía inexpertos persiguen a los manteros más metros de los recomendados. Los nigerianos son fuertes y veloces, huyen de sus perseguidores con determinación, cargando sus grandes lonas donde transportan su preciada mercancía con la que se ganan la vida. Se dividen siete por la calle del Carmen y cinco por Preciados. A toda velocidad bajan la calle evaluando a conveniencia de desviarse hacia la izquierda en cuesta arriba hacia la plaza del Carmen o continuar hacia Sol. Las viandantes se apartan hacia las fachadas evitando la estampida de los fuertes subsaharianos cargados, salvo una mujer ajena al ruido externo por su perfecto aislamiento acústico lleno de música y la mirada perdida buscando la cremallera del interior de su bolso.

 

El choque inevitable se acompaña de gritos de otras personas que con ánimo de prevenir a Reyes movían sus brazos y subían la voz. Primero le rozó el hombro de uno de los corredores que la hizo trastabillarse, el segundo mantero chocó de lleno con ella y sin bajar su ritmo continuó corriendo mientras Reyes perdía el equilibrio e iniciaba su caída hacia el suelo, el tercer mantero, Charles, sin poder evitarlo, golpeó con su rodilla la sien de Reyes de manera que su cabeza giró con fuerza hacia su izquierda con la mirada perdida y sus auriculares volando. Del violento golpe Charles consigue no caer y tras una mirada de reojo ve caer a una mujer y a varios viandantes rodearla para ayudar.

 

Los servicios médicos de urgencia se hicieron cargo de Reyes, evacuándola en ambulancia hacia el hospital más cercano. 

 

La ausencia de noticias en prensa me hace pensar que sobrevivió.

 

Por la noche, metros más abajo, junto a una papelera, un indigente analiza el contenido de un bolso azul y unos auriculares rotos. Dos décimos de lotería, un teléfono móvil y un monedero con trescientos euros. Lo suficiente para vivir un par de meses. La lotería se puede vender a los últimos de la fila de la administración, el móvil también tiene su mercado, lo apaga para que no suene, seis llamadas perdidas de “Lau” y “Eu”. Mañana lo venderá. La documentación de la dueña, al buzón, Correos si quiere se encargará de que llegue a su propietaria.

 

Multitud de personas aisladas compartiendo espacio y tiempo. Muchas de ellas solas y otras muchas aisladas por sus auriculares. La mayoría son turistas procedentes de provincias. Comparten su plan, Primark, comprar lotería, ir la ver El rey león y cenar lo que se pueda. La normalidad de siempre. Terminó la pandemia.

 

Un fin de semana en el centro de la gran ciudad. Reyes, víctima colateral. 

Buen viaje, Joe

  Joe, simplemente Joe. Omitiendo, desde siempre, el rango familiar de tío. Recuerdo tu aterrizaje entre la familia cuando Ana, también sin ...