25.10.21

Una mentira mil veces repetida no se convierte en verdad



 

La ilusión colectiva creada entre los ciudadanos nace del desconocimiento general. Ya sea por la escasa información real y verídica ofrecida por los políticos a los ciudadanos o por la pereza general para buscar la verdad. 

 

Una vez sabido esto, los políticos se apalancan en el uso de determinados datos no siempre contrastados, cargados de ideología, demagogia o repitiendo la idea que prevalece en Europa. Ya tenemos creado el campo de la discusión ideológica. 

 

Cada partido presente en la discusión se arma de un ejército de fieles dispuestos a replicar y hacer eco a cada mensaje publicado por cada una de las partes. Estos ejércitos de fieles cegados de intelecto convierten la política en una eterna pelea entre aficiones, un perenne Madrid-Barcelona de fútbol o baloncesto. 

 

La conversación fluye y es útil cuando a cada argumento esgrimido, con datos ciertos, se escuchan de manera activa con ánimo de comprender e intentar convencer. En el caso de que se enfrenten dos creyentes de idearios diferentes, es imposible la conciliación. La razón se alcanza desde el argumento y la reflexión. La fe se alcanza desde los sentimientos y sin necesidad de contraste. Los fieles ciegos a los dictados políticos e ideológicos oficiales funcionan como creyentes de una secta excluyente sin autocrítica ni raciocinio. 

 

En el año 2012 se aprobó una reforma del mercado laboral en España y desde ese momento todos los partidos de la oposición fijaron como argumento inamovible la promesa de derogarla, incluso llegaron a afirmar que sería lo primero que iban a hacer en el momento que llegaran al poder.

 

En estos años hemos tenido cuatro elecciones generales. 2015, 2016 y tras la moción de censura contra Rajoy, abril 2019 y noviembre de 2019. Desde estas últimas, una coalición PSOE y UP gobierna apoyada por diversos grupos independentistas y de izquierdas. Dividiendo en dos grupos diferenciados el arco parlamentario, algo muy futbolero, algo muy español, recuperamos el triste recuerdo de azules contra rojos. Más carnaza para los creyentes poco críticos y poco ilustrados que siguen las redes sociales como el nuevo libro sagrado.

 

Desde ese noviembre de 2019 las promesas han ido cayendo, el gran éxito del gobernante es ser inmune a las hemerotecas e inventarse los motivos que justifiquen cada decisión tomada con anterioridad. El mundo real nos sitúa como país en un colectivo dentro de una Europa con naturaleza política y económica supranacional, donde poco a poco se avanza en la armonización de las políticas con el fin de llegar a un espacio común real para todos los ciudadanos. El nuevo gobernante una vez se estrena en su puesto toma conciencia de lo que puede hacer en su casa sin ofender al resto de socios y lo que está vedado si no quiere verse excluido de la financiación ofrecida por el resto de los socios.

 

¿Por qué no se ha derogado la reforma del mercado laboral del 2012?, ¿Por qué la parte más demagógica del gobierno se está envolviendo en esta bandera?, ¿Busca provocar una ruptura pensando en una nueva cita electoral que según sus cálculos le pueda ser beneficiosa? 

 

Recordemos lo explicado por el presidente Sánchez en octubre de 2020 como los puntos más lesivos, bajo su punto de vista, de la ley que desea modificar, antes de escuchar a Europa decía derogar:

 

- Derogar el artículo 52.D del Estatuto de los Trabajadores derivado de la reforma laboral del año 2012 que permite la posibilidad de despido por absentismo laboral causado por bajas por enfermedad. Este despido fue avalado por el Tribunal Constitucional el pasado mes de octubre del 2020.

 

- Derogar la prioridad aplicativa de los convenios de empresa sobre los convenios sectoriales.

 

- Modificar el artículo 42.1 del Estatuto de los Trabajadores sobre contratación y subcontratación laboral a efectos de limitar la subcontratación a servicios especializados ajenos a la actividad principal de la empresa.

 

- Limitar la capacidad de modificación unilateral de las condiciones del contrato por parte de la empresa.

 

- Revisar el mecanismo de inaplicación de los convenios colectivos, orientándolo a descuelgue salarial vinculado a causas económicas graves.

 


Hace falta un explicación más clara de los motivos con argumentos, no obstante podemos hacernos una idea sobre lo que subyace en el planteamiento del presidente.

 

Anular la posibilidad de la empresa para despedir a trabajadores que tienen una sucesión de bajas médicas es profundamente ideológica. Desde el punto de vista de un trabajador es injusto poder verse despedido por sufrir alguna enfermedad que le obligue a faltar de su puesto de trabajo por motivos médicos probados. Desde el punto de vista de la empresa en injusto no poder despedir a un trabajador que no llega a un mínimo de productividad porque encadena multitud de bajas. ¿Dónde está la razón? Como en tantas ocasiones en un punto equidistante entre ambas posturas. Los extremos son injustos. ¿Buscaba el legislador el extremo o buscaba limitar el abuso del absentismo laboral? 

 

¿Es un problema el absentismo laboral? Olvidemos la demagogia y la ideología. Según la Encuesta de Población Activa (EPA) en el segundo trimestre de 2021 en España somos 19.671.700 trabajadores. Según el INE y Randstad, cada día 1.049.121 personas no acuden al trabajo diariamente. De ellos el 24,6% de ellos lo hace injustificadamente, 276.968 personas. El debate se amplía sobre la parte del 75,4% restante que con justificación médica son "reales". ¿Necesitamos modernizar el sistema o los criterios de concesión de baja médica?, la reiteración de determinadas bajas médicas ¿llaman la atención o se deben admitir siempre?

 

Es un tema sensible con ramificaciones en otras disciplinas y además ¿tantos simuladores de enfermedad existen? personalmente conozco a alguno, un caso de migraña oportuna los lunes posteriores a una derrota de su equipo de fútbol favorito. Yo he sufrido migraña casi cincuenta años de mi vida y este caso me daba especial rabia por lo que conozco de lo limitante que puede ser esta enfermedad y lo que luché para que nunca me doblegara hasta el punto de ausentarme de mi puesto de trabajo. Conocí otro caso de oportuna indisposición cada año durante el mes julio. Era tan conocido entre sus compañeros de trabajo que incluso organizaban una porra cada primavera para acertar la fecha concreta de la "aparición de esa enfermedad" que obligaba al empleado a tener dos meses de vacaciones cada verano. Anécdotas que ilustran lo que todos sabemos que existe, el caradura de siempre. Según los números en España hay muchos de estos. Curiosamente según datos del mismo estudio de Randstad y el INE el total absentismo en la Administración pública es del 7,8% (el 2,2% sin justificar), en sanidad el 8,6% (el 2,9% sin justificar), correos y reparto de paquetería el 7,9% (el 3,1% sin justificar). La media nacional de ausentismo está en el 5,2% (el 1,4% sin justificar). Parece que algo hay que solucionar y restar armas a las empresas no parece que sea la mejor decisión y eso que la parte más gravosa del problema corresponde a la Administración.

 

Respecto a la prioridad de los convenios de empresa sobre los sectoriales, entiendo que la voluntad del legislador fue permitir la posibilidad de alcanzar acuerdos entre los trabajadores y su empresa sin tener que depender de los acuerdos sectoriales. ¿Qué hay de malo en ello? Restando la ideología y el proteccionismo sindical defendiendo la existencia de los sectores tradicionales ¿qué razones hay para modificar la prioridad? 

 

Respecto a la subcontratación, el abuso por parte de las empresas reiterando la subcontratación evita la creación de puestos de trabajo estables. Esta propuesta de modificación propuesta por el presidente parece sensata para limitar los abusos y crear empleo estable.

 

Las dos últimas propuestas son para limitar su aplicación, no habla de derogación sin más. Toda limitación que se plantee con lógica, conocimiento y lejos de la demagogia tiene posibilidades de conseguir efectos positivos en el mercado de trabajo.

 

Si todo lo expuesto resume el punto de vista del gobierno, ¿qué razones hay para no haber realizado una reforma a la reforma laboral? 

 

Parece que la parte del gobierno que se relaciona con Europa y controla la economía, entiende que la reforma de la reforma no ayudará a la recuperación económica tras una crisis sin precedentes por la influencia en el parón de actividad por la pandemia. Por otra parte, la parte del gobierno que solo figura y crea eslóganes desea aprovechar la imagen formada alrededor de la vicepresidente de Trabajo por su capacidad de llegar a acuerdos para fijar y prorrogar los ERTES que han protegido el empleo de miles de trabajadores. Una dirigente política emergente entre una izquierda radical que pierde en cada proceso de elecciones su capacidad de influencia, marcando sus divisiones internas y sin capacidad para unificar el mensaje. En la habitual, llenos de demagogia e ideales sin contraste efectivo en una sociedad avanzada necesitan de una bandera a la que aferrarse, la reforma laboral. Querida ministra, tras casi dos años en el puesto ¿por qué no se hace?, ¿porque no eres capaz de convencer a tus socios de gobierno?, ¿ni a tus socios europeos? o porque sabes que es más rentable electoralmente hablar de algo que enfrentarse a la realidad del mercado al cambiar las reglas. No vaya a ser que la derogación de la reforma laboral traiga consigo más desempleo.

 

Esto es la política, prometer algo sin explicarlo bien. Tan complejo como el mercado laboral y tan lleno de sesgos inconscientes, sin contraste de datos con un cultivo abonado de ideología. 

 

No por mucho repetir una mentira se convierte en verdad. Un reto en apariencia veraz no tiene por qué ser cierto. El tiempo lo dirá. 


Una duda que me queda, ¿en qué medida reformar el mercado laboral en contra de la opinión europea puede comprometer las ayudas prometidas a España para recuperar la economía y modernizarla tras la pandemia?


Todo huele a oportunismo y a estrategia electoral a medio plazo. Seguirán prometiendo su derogación con la ambición de conseguir algún voto en esta simulación. Echando la vista atrás, ¿cuántas veces lo han prometido en los últimos meses? y tras estas promesas reiteradas ¿alguien se cree el relato?


Lo dicho, no por mucho repetir una mentira se va a convertir en cierta.


Me aburre la política.

17.10.21

El Juego

 


Correo electrónico


De: Club de Debate (Universidad Madrileña de Liderazgo - UML) 


Asunto: Convocatoria para El Juego.

 

"Estimado alumno:

 

Como cada año, en la segunda quincena de octubre, abrimos el proceso de selección de los nuevos miembros del Club de Debate. 

 

Esta semana será la primera de las tres pruebas de acceso para el prestigioso club de debate de la Universidad, llave de todas las puertas a la excelencia y al liderazgo en nuestro campus. Club exclusivo donde tradicionalmente han sido socios los mejores expedientes académicos de la Universidad.

 

A esta primera oportunidad podrán asistir un máximo de cinco participantes con un mínimo de tres, que serán seleccionados mediante sorteo entre los candidatos solicitantes. 

 

Se trata de un juego donde se premia la capacidad de conversación y la capacidad de darse a conocer a las personas. El tema de conversación se elige aleatoriamente eligiendo una carta de una baraja de cincuenta y dos, cada una de ellas tiene escrita una pregunta que será leída por el jugador a quien le haya correspondido contestar a la pregunta anterior y será quien decida hacia quién va destinada la nueva pregunta. Esa carta no volverá al mazo para evitar su repetición.

 

Se sorteará entre los jugadores a quién le corresponderá abrir el juego. Ningún jugador puede preguntarse a sí mismo. Las respuestas deben ser, en apariencia, sinceras y deben satisfacer la curiosidad de todos los participantes en la mesa del juego y al árbitro. Todas las preguntas son abiertas aunque por su formulación puedan responderse con un sí o un no, todas exigen argumentación. 

 

No está permitido no contestar. Se valorará positivamente que tras una respuesta directa se abra el debate entre todos los jugadores. Como se trata de un juego que exige concentración y seguir una conversación, quedarán requisados en una caja fuera de la habitación todos los móviles y dispositivos electrónicos que puedan distraer a los jugadores, incluidos los relojes. 

 

El vencedor será elegido entre los propios jugadores, en caso de desacuerdo, la decisión final corresponderá al árbitro. El único requisito para ser invitado a ser miembro del Club de Debate es proclamarse vencedor de una de las tres rondas de El Juego. 

 

Los interesados en participar deben inscribirse en el enlace al pie de este mensaje antes del próximo miércoles."

 

El viernes, expectación máxima en la sala del Club de Debate, asisten como espectadores todos sus miembros. Eligen a Esteban, el socio más antiguo del Club al igual que la presidente y el secretario. Una persona meritoria reconocida por todos como justo y sobre todo, gran escuchador. 

 

Veinticinco alumnos han solicitado participar. Un treinta por ciento del total de matriculados al primer curso. Los veinticinco esperan expectantes tras la puerta. A la hora señalada, Esteban bajo el marco del acceso levanta la mano demandando silencio para anunciar los cinco elegidos por la suerte.

 

–Ruego a los nombrados accedan al interior de la sala para disfrutar de El Juego, el resto de los solicitantes seréis convocados la semana que viene para la siguiente prueba que esta vez sí será para todos.

 

El silencio duele cuando la suerte es quien decide el destino. Los cinco elegidos tendrán tres oportunidades para poder conseguir la membresía codiciada por todos. Una por cada prueba de selección.

 

–Rocío Nieve, Laura Bandín, Sergio Contreras, Lucas Trona y Mercedes Peinado

 

La suerte está echada. Los participantes eligen su posición sentándose en las sillas situadas en el centro de la sala. Situadas en forma circular, siendo la principal y más cómoda, propiedad del árbitro, Esteban.

 

El sorteo determina que la primera pregunta la realizará Sergio. Mezcla el mazo con paciencia mientras reparte su mirada entre el resto de los jugadores. Ojos de mirada penetrante, de color negro donde el iris y la niña apenas se distinguen, llegan a intimidar. Juega con esa sensación, disfrutando del nerviosismo creciente entre los participantes mientras baraja las cartas entre sus manos. Finalmente corta el mazo y selecciona la primera de arriba.

 

–La primera pregunta es: ¿Sueles abordar a las personas que te gustan, o te puede la timidez? 

 

Una pregunta incómoda, sobre todo para aquellos a quienes la seducción es un reto inalcanzable. Revisa con su mirada la reacción de los participantes al escuchar la pregunta y elige a su víctima.

 

–La pregunta va dirigida a Laura Bandín.

–Cuando alguien me gusta– comienza Laura– llamo su atención de manera sutil, continuada en el tiempo alimentando su interés por mí y alentándole para que se me acerque. La habilidad mostrada en el acercamiento decidirá mi admisión a su cercanía.

–Eso no responde a mi pregunta. Estás definiendo una estrategia de seducción más pasiva pero no me queda claro si es por timidez, comodidad o por qué razón. Tampoco consigo saber el grado de éxito que consigues con esa estrategia. ¿Puedes contestar a la pregunta, Laura? Gracias.

 

Laura se remueve en la silla, incómoda con la reacción de su compañero. No estaba preparada para este ataque. Muerde levemente su labio inferior calmando su posible reacción racial, como todo en ella. La respiración sube su ritmo marcando el ascenso y recuperación del volumen de su pecho. Interiormente cuenta hasta tres y completa su argumentación.

 

–Puedo comprender que a los faltos de habilidad en seducción le pueda parecer que mi estrategia es facilona o incluso vacía. El intentar influir en los deseos de una persona utilizando otras herramientas distintas a la entrada directa es mucho más sutil y efectivo que un intento sin preparación repleto de frases convencionales. Siento que no sepas valorar lo efectivo de mi estrategia frente a la que parece que insinúas como la única válida que no deja de ser la típica entrada torpe propia de los inexpertos o rudos. No sé medir el éxito de una estrategia frente a otra, solo sé que a mí me funciona y que actores directos y agresivos como parece que puedes ser lo que tú prefieres, conmigo no tienen ninguna posibilidad. Con mi modelo, selecciono a la persona idónea y la invito a acercarse. Si me acerco yo, lo más probable es que la espante.

–Totalmente de acuerdo– interviene Rocío. Una mujer directa suele acongojar a los varones. Todos estamos llenos de ideas preconcebidas, de juicios de valor o sesgos que hemos ido aprendiendo por educación, cultura o costumbre. Una mujer activa en la seducción puede ser conocida como ligera de cascos, facilona o incluso considerarla por los varones como buscona. Una mujer insinuante se convierte en modelo de deseo incrementando el interés del varón elegido. Si además es de belleza reconocible como Laura, más posibilidades de espantar tiene.

–El razonamiento también es válido si se trata de una mujer la elegida. No necesariamente la estrategia que define Laura es heterosexual – Opina Mercedes.

 

El árbitro otorga un pequeño lapso de segundos esperando la intervención de Lucas o la réplica de Sergio. No llegan. Con una seña, indica que es el turno de Laura. Quien aparta la carta elegida anteriormente y vuelve a barajar, fijando su interés en el mazo. No quiere que su torpeza con los naipes la traicione. Elige su carta y mirando a Lucas, lee la pregunta:

 

–Lucas, ¿Alguna vez has discriminado a alguien?

 

De nuevo una pregunta donde los sesgos inconscientes gobiernan nuestro comportamiento frente a determinadas personas por su sexo, raza, religión, vestimenta o acento.

 

El juego se extiende durante tres horas que se harán muy largas para alguno de los participantes por las verdades que se ven obligadas a exponer, muchas de ellas pertenecen al baúl de sus secretos. Las sonrisas se van oscureciendo, el peso de las revelaciones dobla sus entrecejos hasta cambiar los ánimos y las seguridades.

 

Suenan preguntas que no dejan indiferente a nadie:

 

¿Has estado enamorado de la pareja de un familiar? Ahondando en situaciones conflictivas que casi todos prefieren esconder.

–¿Cuándo y en qué situaciones, quieres comportarte mal? Obliga a plantear tus límites morales.

–¿Cuál es tu última búsqueda en Google? Puede resultar algo embarazosa.

–¿Cuántas personas te odian? Saca a relucir tus conflictos y enemistades.

–¿Has hecho algo ilegal en la últimas semanas? Aunque solo sea un exceso de velocidad es probable que alguna ley hayamos infringido.

–¿Te gusta comer caracoles? Puede ayudar a reflexionar sobre comidas que no todo el mundo es capaz de meterse en la boca. Puede ser conflictiva si se pregunta sobre el plazo típico de la zona.

–¿Qué parte de tu cuerpo es la que menos te gusta? Complejos físicos de cada persona.

 De tus amigos, ¿quién es el más (o la más) irresponsable? ¡Qué mejor que hurgar en los trapos sucios!

–¿Cuál es la pregunta que más odias que te hagan? Una manera de ser incómodo.

–¿Entregarías a tu mejor amigo a la policía si supieses que es culpable de un crimen? Los límites de la amistad.

–¿Quién es la persona más importante en tu vida? Dar una oportunidad a los sentimientos.

 

Un juego holandés con una dinámica muy parecida a esta se está promocionando en Amazon y a través de redes sociales. Un conjunto de preguntas incómodas para responder en pareja, familia o amigos. E incluso para conocer a nuevas amistades.


Si necesitamos un juego para aprender a hablar entre nosotros es que la sociedad necesita una revisión. Menos tecnología y más trato. La amistad se mide en cercanía y abrazos no con "me gusta", "likes" o "+" en las redes sociales.

 

Hablar y escuchar. Simple y complicado a la vez.

Buen viaje, Joe

  Joe, simplemente Joe. Omitiendo, desde siempre, el rango familiar de tío. Recuerdo tu aterrizaje entre la familia cuando Ana, también sin ...